La ley del plural mayestático

Al parecer a los papas les asiste el derecho a usar el plural mayestático
El privilegio máximo es no tener jefes ni súbditos
Miguel  Ángel Aguilar, periodista


Este artículo forma parte de un "aprendiz de libro", qué llamé provisionalmente "¡También hay vida en el planeta Burocracia", que espera en el cajón de mi escritorio a que tenga tiempo y pueda completarlo y corregirlo, a ver si me puedo jubilar pronto.

En él describo treinta y cinco leyes de funcionamiento de las organizaciones burocráticas basadas en mi experiencia y observación durante 30 años de trabajo en este tipo de organizaciones. Están escritas con humor, utilizando un lenguaje prestado de las ciencias físicas y matemáticas, poniendo -para cada ley - un enunciado y una justificación que no demostración porque, al fin y a la postre,  ni es física ni son matemáticas.

Enunciado:

Cuando el superior jerárquico emplea la primera persona del plural en una conversación con el subordinado quiere decir que éste último tendrá que realizar algún trabajo sin la participación del superior.

Justificación:

Antes que nada y, a pesar de que sé de sobras que todos tenemos una idea de lo que significa el plural mayestático, me gustaría detenerme en su explicación para que todos entendamos perfectamente de qué estamos hablando. El plural mayestático o, cómo se le conoce en latín pluralis maiestatis, es el uso de la primera persona del plural por el hablante. En general, la persona que usa el plural mayestático no utiliza el pronombre "nosotros" sino "nos".

Históricamente este uso lingüístico ha sido reservado para papas, reyes y emperadores. Es evidente que si, según la antigua teoría política, al soberano le venía el poder directamente de Dios, éste no podía hablar igual que el resto de los mortales. Creo recordar que la reina-emperatriz británica Victoria lo usaba y, no lo sé seguro, pero creo que por lo menos hasta Juan XXIII se ha venido usando en el Vaticano y diría que sigue usándose ante ciertos ceremoniales, pero como hablan en latín eclesiástico se me hace difícil afirmarlo. A nuestro rey no se lo he oído nunca, cuando ha utilizado el pronombre “nos” ha venido seguido de “llena de orgullo y de satisfacción” y precedido de “A la reina y a mí”. Nuestro rey no es amigo de boatos decimonónicos y villas y cortes, se suele decir que es muy campechano, así que igual que renunció a todos los poderes del Estado que le sirvió en bandeja el generalísimo Franco ha renunciado también a tamaña muestra gramatical de majestad.

No estoy yo tan seguro de que su colega británica, la eterna Isabel – hay que ver cómo se está quedando el príncipe de Gales y, dado que los monarcas de la pérfida Albión pueden elegir nombre, sería atinado que escogiera el de Matusalén cuando acceda al trono -, haya renunciado al plural mayestático. No me extrañaría nada que siguiera usándolo porque no tiene nada de campechana y mucho de estirada. Ni tampoco tiene que hacer demostraciones de populismo, que en esto los monarcas ingleses han andado siempre un paso o ciento por delante, desde la firma de la Carta Magna (1), en eso de respetar la soberanía del pueblo.

Por estos pagos el que sí utiliza el plural mayestático es nuestro seleccionador nacional, el bueno de Vicente del Bosque, pero incumple una de las condiciones, no usa el “nos” sino el “nosotros” y me ha dado que pensar. Así que me he ido a la Wikipedia y he visto que existe otro tipo de plural, el de modestia o pluralis modestiae, este plural casa más con la personalidad del personaje, se usa cuando el hablante quiere diluir  el mérito de lo que cuenta en un hipotético grupo que en realidad no existe. A decir verdad, cuando Iniesta marcó aquel gol maravilloso en Johannesburgo, yo habría tratado a Del Bosque - de haberlo tenido cerca - de majestad, santidad o sursuncorda.

A riesgo de hacer un poco más larga esta justificación me gustaría realizar otra aclaración antes de entrar en materia, sobre todo para aquellas personas que no tienen la dicha de trabajar en una organización burocrática y no tienen el placer de conocer sus mecanismos internos. Una organización burocrática para que merezca tal nombre debe cumplir ciertos requisitos (2), quizás el principal sea que se debe respetar el principio de jerarquía. Los puestos de trabajo se organizan en función de una escala de mando, en el que cada nivel es subordinado del nivel superior. La jerarquía va en el ser de la burocracia, si no hay jerarquía en una organización formal puede ser otra cosa pero desde luego no es una organización burocrática.

Otra cuestión es si esa organización jerarquizada es un caos organizativo o no existe disciplina, de manera que cuando le das una orden a tu subordinado tienes que recurrir a lugares comunes, al espíritu de cuerpo o  al rosario y rezar todo lo que sabes. Claro que existe la ventaja, en estas mismas situaciones de poca disciplina, de que cuando tu jefe te ordena algo te entra la risa.

Es curioso que muchas veces cuando los jefes encargan alguna tarea a sus subordinados utilizan la primera persona del plural. “Tenemos que hacer el informe tal” o “tenemos que buscar el documento cual”. Pero eso no significa en absoluto que el superior jerárquico vaya a tomar parte, en realidad - todos lo sabemos -te lo está encasquetando. Estrictamente este no sería el caso del plural mayestático, aunque se le parece y por eso hago uso de él en esta ley. Ni mucho menos es el caso del plural de modestia, sería de otra clase que no he encontrado en la Wikipedia (3). Así que mantendremos el título de mayestático a falta de algo mejor.

Otros jefes hay que directamente dicen “Fulanito tienes que hacer el informe tal” o “Menganita busque usted el documento cual”.

Otras personas utilizan el impersonal, “hay que hacer el informe tal” o “hay que buscar el documento cual”.

En mi opinión, después de mucho observar y de pasar por muchas situaciones diferentes, he llegado a la conclusión de que los que ordenan directamente a una persona realizar algo, en singular, directamente, están en un contexto en el que la diferencia jerárquica entre el subordinado y el jefe es muy grande, o bien, se trata de una organización con una disciplina muy fuerte en la que - aunque la diferencia de nivel no sea grande - si se guardan las formas entre niveles o, por último, la personalidad del jefe es muy fuerte y le importan muy poco los sentimientos que pueda albergar el subordinado o la disciplina establecida. Si, además utiliza la fórmula del usted, quiere remarcar la diferencia de estatus que existe entre ambos y reforzar la autoridad.

En el caso del uso de la primera persona del plural el superior pretende, aunque sea sólo de forma léxica, integrarse con la persona o personas que van a llevar a cabo el trabajo en una especie de equipo. Se trata de una forma más democrática de actuar, normalmente, en entornos jerárquicos con poca diferencia de nivel u organizaciones con poca disposición a la disciplina, o bien si no se dan estas situaciones, que el jefe es un calzonazos y se le hace más fácil ordenar de esta manera.

Cuando se usa el impersonal es porque la diferencia jerárquica es práctica o completamente inexistente, o bien, existe poca o ninguna disciplina y no se puede ordenar nada de forma explícita. Se lanzan al espacio aéreo este tipo de pseudo-órdenes en la esperanza de que alguien recoja el testigo ya sea por profesionalidad, por vergüenza torera o por estulticia manifiesta.

Esta esperanza, la mayor parte de las veces queda frustrada, pues no es fácil encontrar a un profesional, un torero con suficiente vergüenza o alguien tan tonto como para presentarse voluntario, esta es la razón principal por la que las organizaciones tienen una estructura más o menos jerárquica con mayor o menor disposición a la disciplina.


Juan Carlos Barajas Martínez

Notas:

(1)  La Carta Magna es un documento que la nobleza británica hizo firmar a Juan Sin Tierra en el siglo XIII en el que se limitaban los poderes del soberano y se la considera como un antecedente del constitucionalismo.
(2) Max Weber ha sido el teórico principal de la burocracia. Los requisitos que debe cumplir una organización para ser burocrática según este autor son:

  1. Consiste en una organización continua de funciones (cargos) oficiales limitadas por reglas.
  2. Cada cargo tiene un grupo de competencias limitado.
  3. Los cargos están organizados de manera jerárquica
  4. Los cargos llevan aparejados unas cualificaciones técnicas que requieren de preparación o formación específica
  5. Los empleados que ocupan estos cargos no son propietarios de los mismos, no los pueden vender ni heredar ni dejar en herencia, tampoco son dueños del material que usan en su trabajo.
  6. Todos los actos administrativos están regulados por normas escritas.
  7. Los empleados  ocupan sus cargos tras haber superado un proceso de selección en el que han tenido en cuenta sus capacidades y no por adscripción a un determinado grupo social o por clientelismo.
  8. Los ascensos a posiciones superiores dependen de su competencia demostrada y de su antigüedad en la organización.
  9. Tienen como principal o única fuente de ingresos el salario que reciben según su posición en la organización.
  10. En su relación con sus clientes las burocracias aplican normas universales e impersonales con el fin de conseguir un funcionamiento predecible, eficaz, sin favoritismos ni decisiones arbitrarias
En mi artículo "burocracia y organizaciones burocráticas" existe una completa definición de la burocracia y de las organizaciones burocráticas.


(3) Según la Wikipedia existiría una tercera clase de plural que es el plural de autoría o pluralis auctoris pero sería el menos parecido al tema que tratamos pues el jefe no quiere ser autor de nada.

Autor: Omar, Fuente: Lenliblog


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14 comentarios:

  1. Me ha gustado mucho sobre todo este párrafo:
    "Históricamente este uso lingüístico ha sido reservado para papas, reyes y emperadores. Es evidente que si, según la antigua teoría política, al soberano le venía el poder directamente de Dios, éste no podía hablar igual que el resto de los mortales. Creo recordar que la reina-emperatriz británica Victoria lo usaba y, no lo sé seguro, pero creo que por lo menos hasta Juan XXIII se ha venido usando en el Vaticano y diría que sigue usándose ante ciertos ceremoniales, pero como hablan en latín eclesiástico se me hace difícil afirmarlo. A nuestro rey no se lo he oído nunca, cuando ha utilizado el pronombre “nos” ha venido seguido de “llena de orgullo y de satisfacción” y precedido de “A la reina y a mí”. Nuestro rey no es amigo de boatos decimonónicos y villas y cortes, se suele decir que es muy campechano, así que igual que renunció a todos los poderes del Estado que le sirvió en bandeja el generalísimo Franco ha renunciado también a tamaña muestra gramatical de majestad."

    No sé noto mucho cashondeo como decimos en mi tierra.

    Anselmo

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    1. Se me ocurre una variante o variación de lo que mencionas. Y como me resulta dificil explicarlo te pongo dos ejemplos, cuando mi mujer me dice:
      - hay que ir al supermercado
      - que no se nos olvide bajar la basura

      En ningún caso va a ser ella quien ejecute la acción.
      ¿Donde lo incluiríamos dentro de tu análisis?

      Un abrazo

      Juan cho

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    2. Muchas gracias Anselmo, se intenta ser lo más divertido posible

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    3. JuanCho se trata de la variante impersonal matrimonial. Cuando nuestras mujeres utilizan el impersonal ya sabemos a qué atenernos. En cuanto a la segunda fórmula, "que no se nos olvide bajar la basura", es plural mayestático del jefe como en el artículo, sólo que el jefe es tu mujer. Jajaja. Muchas gracias JuanCho. Un abrazo

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  2. un gran amigo mio tenia un jefe, muy jerarquista que disfrazaba su bajo desprecio a los subordinados, in tentando un plural pero con el siguiente formato: "tenemos que tener exito en este proyecto, porque no quiero que UD, fracase". El no va mas.... muy bueno

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    1. Ay Dani me lo tenías que haber contado antes, encajaba perfectamente en el artículo, jajaja, que frase tan genial, primero apuntandose al éxito mediante el plural mayestático y luego recurriendo al singular proletario para achacarte el posible fracaso. Impresionante.

      Muchas gracias Dani

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  3. Jobar que bueno ha sido este...

    Felicidades por el artículo.

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  4. Hola, ¿Que me dices de estos fragmentos de tu obra?

    "ya que para eso estamos nosotros, para afirmar lo contrario..."
    "Pero vamos a asumir, para los propósitos de este artículo...."
    "La siguiente pregunta que hemos de hacernos..."
    "según la opinión generalizada de casi todos nuestros sabios....."
    "Otra pregunta en nuestra serie de preguntas sería si, ya que hay....."
    "según el consenso de nuestros sabios...."
    "en los párrafos anteriores es cierto, que tenemos otra especie...."

    Los fragmentos que acabo de exponer en comillas son elegídos al azar tan solo de las primeras 3 hojas; quiero decir que todo lo expones en tu obra va en terminos de "nosotros, hemos, vamos, tenemos.....etc"

    ¿Estas usando el plural de modestia para diluir la reflexión y el esfuerzo mental entre un grupo hipotético que en realidad no existe?

    Y cuando te refieres a "nuestros sabios", de la mísma manera que se refieren la gente por la calle a "nuestros políticos"...¿Que quieres decir con eso?....¿Acaso tienes algún sabio?...¿O sus logros te pertenecen?....

    Cuando un sabio, científico o entrenador de futbol habla en plural modestico, lo hacen para crear una especie de ilusión en los demas, de tal manera que les hacen sentir que pertenecen a un grupo exitoso aunque en sus vidas no tengan nada mas que pobreza. Es parte de la política de cualquier negocio. Pero cuando la gente normal y corriente que no producen, crean o inventan, hablan en plural y se atribuyen a si mísmos y se sienten indentificados con los logros de los demas.....¿ QUE TIPO DE PLURALIDAD UTILIZAN ?

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  5. Estimado anónimo. Agradezco tus comentarios pero como no sé de qué van ni de quién vienen pues no voy a contestarte. No pienso aventurarme en regiones que no conozco no vaya a ser que o me pase o no llegue.
    Tan sólo diré que no creo que la gente normal no produzca, no cree o no invente, al menos por definición, creo que la gente normal también mueve el mundo, es más, probablemente sean los que mueven el mundo.
    Un saludo

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  6. Muy bueno. Es curiosa la rapidez con la que la complicidad y cercanía del "TENEMOS que hacer tal y cual" se suele diluir al primer signo de que la actividad en cuestión va a salir rana. "La que ESTAS liando!!!"

    No se si este curioso comportamiento tiene un nombre; en caso de que no, lo bautizaré como singular marronífero, y puntualizo que se trata de una construcción muy versátil, tan apta para la vida profesional como para la doméstica ;-)

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  7. De hecho, es plural sociativo

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  8. Si es plural sociativo pero es más humorístico si se tilda de mayestático

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  9. Muy interesante. Gracias por compartirlo.

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